«La verdad te hará libre»

«La verdad te hará libre»
Siempre.
Aunque tengas que pagarle a un abogado penalista.
La verdad, por sobre todo, te da la libertad de ir con mirada tranquila. Con corazón orgulloso de latir junto a tu alma.
Ser tu verdad te libera.
Reconocerte, libera.
Dejar que te destruya, libera.
Si explota, que explote y que duela, porque después, libera.
Tú verdad, tu pie en el mundo.
El orgullo de encarar una mañana con ganas, después de tanto tiempo a oscuras. Con lo que sos, con lo que hacés. Con lo que aprendés y asumís.
Con lo que no esquivás.
Podés ser. Vos decidís quién. Las decisiones buenas traen cosas buenas. Las malas… Ya lo sabemos.
El corazón sabe. Siempre sabe.
Cuanto más tapemos, más va a doler.
La verdad es dura solo cuando se acepta, después libera.
Asumite en el desequilibrio que sentís, que la vida seguramente también te lo está mostrando.
Partí desde ahí.
Reconocer, siempre es el primer paso.

«Remontando en vuelo con mis fragmentos»

Tu lecho cruento es masivo,
Dolor de pocos dejar de amar.
Cerrar los ojos,
Arrancar.
Y cuando empieza a sanar,
por algo,
se desgarra, vuelve a llorar.
Vuelvo a respirar, nuevo día…
Hasta que un nuevo dolor
Me vuelve a quebrar.
Los bordes no están libres,
Aquí hay que cortar.
Llevo un año de cirugía en cirugía,
Emocional.
Extirpando todo cuanto hayas dejado,
también lo intoxicado.
Me quedo con lo que tengo,
Me quedo con lo que aprendí,
Me quedo con lo que sé,
con lo que ví y sentí.
Me quedo con todo lo mío, conmigo,
que por mucho tiempo creí,
era tuyo.
Y así, juntando mis partes rotas,
con lealtad absoluta,
Voy sanando.
Soy magia,
Puedo con esto. Puedo con todo.

Hoy la paciencia se acurruca en mis ojos.
La respiración consciente se vuelve mí mantra.
Pies al pasto, mirada al cielo…
Falta poco para terminar de padecer todo este trago amargo.
Aunque sienta que ya no puedo, a las claras voy pudiendo.

Resistencia

Estos momentos me desconectan del amor que llevo.
Me intoxican el alma con sentimientos que ya no quiero.
Me recuerdan lo que sí fui,
reclaman la careta que usé
durante tanto tiempo.
Cuánto más desacartono mis alas grises, más resistencia siento.
Y es que en la resistencia
encuentro la respuesta,
lo que estoy buscando
hace tanto tiempo.
Cuánta más fuerza hace el afuera,
para volver a viejos patrones,
más certezas tengo.
Sigo confiando en el proceso,
aún llorando, aún en el suelo.
Ya estoy despegando,
de a tropezones aprendo…
Pero cuando le tome la mano,
por nadie, nunca más,
vuelvo a frenar mí vuelo.

Secuelas

Otra noche de llanto,
profundo, desconsolado. Agotador.
Mí cabeza estalla:
Culpa, rechazo y hasta algo de rencor .
Injusto, yo no pedí nada de esto.
La rehabilitación está siendo dura,
esporádica, pero más oscura.
Juegan con mí cabeza, fantasmas
De la antigua época.
Tironean de mis puntos, para ver hasta dónde quema.
Hoy estoy sin fuerzas.
Se cierra el pecho, la garganta,
soy más que este miedo.
Ya no hay suministro,
Ya no quedo paralizada.
Sé que solo es un momento,
confío desde las entrañas
en el proceso.
Ya mañana,
voy otra vez,
pero con más ganas.

Vacío, estás vacío.

Loco?
Loco es que alguien caiga tan bajo como para plagiar palabras de despedida.
Loco es que alguien no tenga herramientas para expresar su propio dolor y necesite USAR los sentimientos de otros, sin reconocer que no le pertenecían.
Loco es que se juegue con la muerte, para lograr un poquito de empatía.
Loco?
Loco es darme cuenta, después de 27 años, que yo también compré tu hipocresía.

Verdad

Estoy cansada de mantener silencio.
Ya fue, finjo un brote psicótico… Si sigo así, no necesito fingirlo. Y quizás de eso se trate. Dejar de fingir.
No quiero disfrazar de locura lo que me hace mal. No. Basta! No quiero sonreír para el público.
Quiero sí, la sonrisa genuina, la que llevo, sin dudar si es correcto. Porque lo que me hace feliz sí es correcto. No es de locos. Ni de flojos.
Pero hay cosas que no se hablan. O que se hablan, pero no se entienden.
Quién puede entender el caos de donde vengo?
Aún cargo resentimiento. Tristeza un poco y de ideales, ya me estoy limpiando.
Aún, voy tomando consciencia del daño. El alma abierta, que todo esto sirva de algo. Y va sirviendo, de mucho, aunque todavía me queda largo rato.
Voy recordando que soy capaz de algo, con el alma tranquila, aprendiendo de mis pasos.
No es fácil recuperarse, lloro de vez en cuando.

De mí vida, te fuiste. De mí realidad te eché.

Despertaste a mi loba.
Solo vos podías generar esto.
Solo en la oscuridad absoluta
Pude ver mí luz.
Cada trago, cada lágrima fue calmando
mí agonía.
Solo con vos podía ver así de cruentas mis heridas.
No podías saber, no quería que supieras que mí loba renacía desde el mismo fuego que atizabas y también sin saberlo, lo oxigenabas.
Empecé a contar y me dí cuenta que en matemáticas, no soy tan mala.
Quisiste alimentar lo peor de mí y me diste las llaves para encontrar mí cielo.
Ahí la llevo,
Entre el arriba y el abajo,
Entre lo que fue y lo que busco.
Entre lo que tengo y lo que anhelo.
Entre lo que viví y ya no quiero.